La República Oriental del Uruguay toma su nombre de la ubicación de su territorio al oriente del río Uruguay. Este factor geográfico, razones históricas mediante, determinó que se llamase, como aún suele suceder, "orientales" a los uruguayos, aunque, como es obvio, el Uruguay es un país que pertenece al hemisferio occidental. En cuanto al vocablo "Uruguay", proviene del idioma guaraní y es traducible por el "río donde vive el pájaro".
Los 176.215 kilómetros cuadrados de territorio uruguayo se extienden con suaves ondulaciones que no presentan ni altas montañas ni amplias llanuras. En esta superficie sin grandes obstáculos domina la penillanura con salientes conocidas con el nombre de cuchillas, cortadas por cursos de agua.
El cerro Catedral posee 514 metros de altura, es el punto más elevado del país y predomina sobre una cadena de sierras que sobresale en el paisaje.
Los grandes ríos que pertenecen a la vertiente atlántica conforman una
caudalosa red fluvial, donde se destacan cuatro cuencas hidrográficas: la del Río de la Plata, la del río Uruguay, la formada por la laguna Merín y la del río Negro. Estos cursos de agua y sus afluentes son importantes vías de comunicación, fuente de agua potable y generadores de energía a través de las represas.
A ello se le suma los 450 kilómetros de costa sobre el río y los 220 kilómetros sobre el mar con playas preciadas para el desarrollo turístico.
Por estar situado en la zona templada del hemisferio sur, Uruguay posee un clima moderado con temperaturas medias que van de los 12º en invierno a los 25º C en verano. Los días soleados predominan durante casi todo el año, aunque es frecuente cierta inestabilidad en el tiempo. Los vientos que provienen del norte otorgan humedad y calor a la región mientras las ráfagas del pampero y del sur son más frías y secas.
De acuerdo con los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, la población alcanza los 3.323.906 habitantes, con una densidad demográfica de 17,8 hab. por kilómetro cuadrado y una edad promedio de 32,60 años. La mayor concentración se da en Montevideo, con un 43% de uruguayos, lo cual denota su característica esencialemente urbana. La tasa de natalidad es la más baja de América del Sur, pero la expectativa de vida es alta, con un promedio de 72 años para los hombres y 74 para las mujeres.
En los inicios de la organización estatal, la política inmigratoria de puertas abiertas posibilitó el ingreso de europeos, principalmente españoles e italianos. A su vez, existe una pequeña proporción de descendientes de africanos que llegaron en la época de la dominación española. A diferencia del resto de los países de América Latina, Uruguay no posee población indígena, ya que ésta desapareció del territorio a fines del siglo XIX.
El idioma oficial es el español.
La consitución uruguaya garantiza la completa libertad de culto, que se efectiviza en todo el país a través de diferentes religiones. Aunque la religión Católica Apostólica Romana es la que profesa el 56.2% de los uruguayos, dado que es la manifestación de fe más antigua de la república, existen más de 70 cultos entre los que se destacan el protestantismo, el judaísmo y el islamismo, entre otros.
El sistema monetario se basa en el peso uruguayo (urug $), que equivale a 100 céntimos. Se emiten monedas metálicas de 1, 2, 5 y 10 y papel billete de 50, 100, 500 y 1.000 pesos uruguayos.
Uruguay es una república democrática con sistema presidencialista regida por una constitución nacional, cuya última reforma fue realizada en 1996. La división de poderes en Ejecutivo, Legislativo y Judicial está representada respectivamente por el presidente y sus ministros; la Asamblea General compuesta por la Cámara de Representantes y la de Senadores; y la Corte Suprema de Justicia y los Tribunales. Los cargos electivos son designados por el voto del pueblo uruguayo cada cinco años.
El Estado se organiza en 19 departamentos gobernados por un intendente municipal que también es elegido por sufragio. Sobre la bahía del Río de la Plata se sitúa la capital del país: Montevideo.